viernes, 6 de febrero de 2009

Poema 18

La locura de muchos de nuestros amados hermanos
es que han decido dejar de "ver"
de ver lo que "es invisible a los ojos"
de ver lo que está en lo más profundo de cada uno
lo que está en la mismisdad.

Por eso nuestra misión el "ver" cláramente
ver lo que los otros han renunciado a contemplar,
lo que se nos da como don
y que se convierte en vocación.

Pero nadie puede ver de noche
Sólo viendo con la luz del Sol
podemos tener certeza de que lo que vemos es real
de que no nos mentimos, o vemos sólo que queremos ver.

La luz del Sol que nos tan dulcemente la Luna
debe ser nuestra única herramienta en nuestra acción contemplativa
de nuestro ser, donde se inscribe quienes somos
y por lo tanto quienes tenemos que ser.

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